En nuestro
Hogar tenemos un gran porche que abarca todo el frente de la casa, con muchos
asientos de distintos tipos y un techo de material plástico transparente que
nos guarece de la lluvia y el sol directo, y está adornado de muchas macetas
con plantas de muchos tipos. Hace unos días, estábamos ahí Carlos el Flaco y yo
cuando pasó un muchacho repartiendo publicidad. El Flaco se acercó a la reja y
lo tomó. Lo leyó y me lo entrego para leer.
Carlos
comentó:
“No… pues
aquí ni las monjas quedarían”
Tengo una
amiga en el hermoso Río de Janeiro, Luisa María a quien conocí en un viaje que
tuve la oportunidad de hacer a esas tierras hace como 18 años. Ella es de El
Salvador, pero hace muchos años que radica en Río. Me dice, entre otras cosas,
que aquel que lee mi Blog, sabe muy poco de mí y me invitó a llenar el
siguiente cuestionario para darlo a conocer y hablar un poco de mi. Yo creo que
tiene razón y le prometí hacerlo. Aquí está:
Edad:
Profesión:
Lugar de nacimiento:
Familia:
Música:
Libro:
Canción:
Cantante:
País que quieres conocer:
Actividad
actual:
Expectativas:
|
72
Mil usos en
el medio artístico. Cine, teatro TV
Mérida
Yucatán, México
2 hermanas,
2 hermanos, hijo, hija, nieta y nieto.
Tradicional
de América Latina y clásica. Trova. Bohemia.
Cien años
de Soledad
Madrigal de
Don Felo, Felipe Rivera Goyco
Danny
Rivera.
Cuba y
América Latina.
Escribir,
platicar, ver TV, aburrirme.
Seguir
escribiendo, platicando, viendo y aburriendo.
|
Me dicen Febo, por mi parecido al personaje de historietas de "La pequeña Lulú.
Desde el ventanal de mi recámara, puedo observar un pequeño jardín cuidado con esmero. Estoy en el primer piso. Debajo de mí, habita Teresita, otra residente de este gran Hogar. Ella fue periodista en sus buenos años productivos. Otros compañeros son Carlos, “Luisito”, el corajudo de Avena, Donceles, Sor Mary y algunos más, independientemente de las otras monjas como la Madre Superiora, que dirige esta Casa-Hogar. Mi diversión principal a solas, consiste en una pantalla LCD que me regaló mi nieta Ana hace poco más de un año, cuando vine a vivir aquí.
Desde el ventanal de mi recámara, puedo observar un pequeño jardín cuidado con esmero. Estoy en el primer piso. Debajo de mí, habita Teresita, otra residente de este gran Hogar. Ella fue periodista en sus buenos años productivos. Otros compañeros son Carlos, “Luisito”, el corajudo de Avena, Donceles, Sor Mary y algunos más, independientemente de las otras monjas como la Madre Superiora, que dirige esta Casa-Hogar. Mi diversión principal a solas, consiste en una pantalla LCD que me regaló mi nieta Ana hace poco más de un año, cuando vine a vivir aquí.
Paso muchas horas frente al televisor
y algunas de ellas, están salpicadas por corajes. Por esto me decidí a escribir
mis puntos de vista, de acuerdo a mis muchos años de transitar por el medio
artístico.
Por ejemplo:
En un noticiario me enteré de que el
actor Juan Antonio Edwards, estrena “Diario de un Loco”, de Gogol en teatro.
Esta obra fue bien conocida en México, gracias al talentoso Carlos Ancira (†),
quien la representó por más de 20 años. Todo bien, hasta ahí, pero al final de
la noticia nos invitan a acudir a verla con “el primer actor Juan Antonio
Edwards”. Al señor Edwards, lo vimos hace años en telenovela de Televisa junto
con Rogelio Guerra, entre otros, en una producción con el inconfundible corte
cursiliento tipo Valentín Pimstein y posteriormente, en teatro en “11 y 12” de
Roberto Gómez Bolaños. Por supuesto, es solamente lo último que tuve
oportunidad de ver porque tiene una amplia trayectoria, ya que fue actor niño y
ahora debe rondar los 54 años. Sin embargo, siempre se representó a sí mismo,
es decir, nunca llegó a hacer alguna caracterización que le diera un lugar
importante como histrión, es por esto que me pregunto, con este ejemplo y
muchos más, ¿quién le dijo al Sr. Edwards que es un primer actor?
Carlos Ancira
En la cartelera podemos encontrar a
César Bono en “Defendiendo al Cavernícola”, al que anuncian como “Primerísimo
Actor”. Estamos de acuerdo que no hay nada antes de “Primero”, a menos que sea
el Cero, la nada, pero con el afán absurdo de ponderar más allá de lo correcto,
se usa indiscriminadamente “Primerísimo”. Como van las cosas, al rato van a
usar, para ser más, “El chido actor...”
En mis tiempos…
Regresando
al joven Edwards, espero que la idea de anunciarse como primer actor, no sea de
él, que sus productores, seguramente con ganas de promocionar con más fuerza la
obra, lo hayan convencido de usar ese epíteto tan difícil de alcanzar, sobre
todo en estos tiempos con tantos seudos actores y actrices habilitados, en
mucho, gracias a las escuelitas de las televisoras, pero les falta lo que al carrizo, lo de
adentro. Hay hartistas (de harto) y artistas.
Esta oportunidad de Juan Antonio, con
un monólogo de “altos vuelos”, diría “Margarito Ledesma”, es precisamente el
principio del camino para convertirse en un Primer Actor. Será interesante
mantenerlo en la mira. La pegunta es: ¿dará el ¡fua!?
Antes de
entrar en materia con Carlos Cardán, empecemos con uno de los escritos que es
parte de aquel encuadernado que encontré y que algún día sabré quién es el
autor. Tarde o temprano aparecerá.
Querida hermana:
Hace mucho tiempo
que no te escribo, pero no es por mi culpa, sino por el trabajo y también
muchas cosas que le quitan a uno el tiempo. Tu sabes, compromisos, trabajo
casero y también, hay que reconocerlo, algunos ataques de auténtica y genuina
hueva.
Hace algunos
días, Yolanda me encargó que le comprara unos cables de teléfonos, de los de
gusano, que venden en la calle de Victoria. Yo generalmente, me bajo del
metro una estación antes, en Balderas y ahí tomo una pesera que me deja en la
esquina de la Anda, pero también en la estación Juárez, a una cuadra de la
calle Victoria. Ahí pasan peseras que me dejan en la misma esquina, pero que
tardan mucho más en pasar. Te platico esto que aparentemente no es
importante, pero ya verás que si lo es, y muy importante. Por la mañana, ése
día, tomé el último boleto del metro que me quedaba, lo puse en la bolsa de
mi camisa y me puse el saco. Aparté en una bolsa del mismo, $7.50, que
cuestan cinco boletos y en la otra bolsa otros $7.50 que cuestan mis
cigarros, y una moneda de dos pesos en la bolsita monedera del pantalón, para
mi pesera. Tomé mi portafolios, (casi no uso portafolios, pero ése día, para
colmo de males, tenía que llevar unas cosas a la oficina) y salí al encuentro
de un día más. En la tienda, compré mis cigarros y seguí al metro. Compré mis
cinco boletos, pero uno me lo dieron suelto y los demás en tirita. Los tomé
con la mano derecha, mientras sostenía el portafolios con la izquierda y me
dirigí al máquina torniquete. Casi al llegar a ella, con las manos ocupadas,
no podía sacar el boleto de mi camisa. Lo que hice, para no quedarme paradote
con cara de baboso, fue dar una vuelta en óvalo hacia la taquilla, sin perder
el ritmo del paso, y así tuve tiempo de guardar los boletos nuevos y sacar el
anterior, casi a punto de llegar al torniquete. ¿Te fijas? Si no fuera por mi
habilidad para sortear los imprevistos, hubiera tenido que usar un boleto al
que no le tocaba. Ya en el metro tuve suficiente tiempo de separarlos y
numerarlos del uno al cinco, para irlos usando. Me bajé en la estación
Allende, y caminé hasta Victoria. Casi al llegar a la esquina, pensé: “Solo
falta que una pesera ya esté en la esquina y cuando salga de comprar los
cables no la alcance y se tarde el chorro en pasar otra”. ¡No lo hubiera
dicho! Ahí estaba la condenada, parada en el alto. Te juro que hasta me
pareció que tenía cara burlona. Me sentí humillado. A veces, he tenido que
esperar hasta 15 minutos a una condenada pesera en esa esquina. Pero no podía
quedarse así. Me subí a la condenada y me bajé en la otra esquina, por la
puerta delantera, para verle la cara. No sé si me creas, pero me pareció que
ya no estaba sonriendo. Claro que tuve que caminar de regreso, una cuadra muy
larga por cierto, para comprar los cables, pero a mí no me jode ninguna
pe-cerda. Cuando hice mi compra, tomé un taxi porque tardaba mucho la pesera
y ya se me hacía tarde.
Bueno, ésta
vez, quiero aprovechar para enviarte algunas cosas que he escrito. La
primera, “No permitas”, en rojo pasión, es una cosa que escribí hace muchos
años y que mis hijos me recordaron porque les gustó y yo ni siquiera sabía
que la habían leído. Cuando la busqué, no la encontré. Seguramente la tiré
alguna vez que hice limpieza. De tal manera, que es una recopilación mental,
de lo que más o menos decía el original. Está combinada con los sucesos
actuales en mi vida, con aquella que te platiqué. Como tú sabes, ella recibe
la visita de su hijo por una quincena de cada mes y cuando estamos en su casa
esa quincena, no podemos (debemos) hacer “travesuras”, como ella misma dice,
porque su hijo podría llegar en cualquier momento. La segunda cosa que te
envío, “Dolores”, es algo que se me ocurrió, ahora que estoy acudiendo al dentista,
desde casi hace un año y donde hablo conmigo mismo…… Quizá debería decir
“Pienso conmigo mismo”. Espero que no te aburran, porque cosas muy communes.
Supongo que ya se ha escrito por muchas personas a las que les sucedió algo
parecido, pero, en fin, espero que mi versión te guste.
|
Encontré también “Dolores y “No
permitas” en el cuaderno y aquí se los transcribo.
No permitas.
No permitas que
te bese. No permitas que te toque.
No permitas que
mis manos aprisionen tus manos,
ni que mis
cabellos se enlacen con los tuyos,
cuando nos
decimos todo lo que nos amamos.
No. No permitas
que mi vista se pierda en tus luceros.
Ni que repose
en tu pecho, porque estos días son ajenos.
No permitas
tampoco que inventen destino mis deseos,
porque mis
labios son diletantes de tus gentiles senos.
Pero, si
permites que te toque y que te bese.
Si permites que
me embriague con tu pecho.
Que mi sentido
se confunda en tus luceros,
tampoco permitas que me aparte de tu lecho.
Dolores.
-Abriendo la boca un
poco más...
-Mjú....
-“Maldita
muela...... y esta doctora que es medio lenta..... ¡Qué lata!...... la dentadura
debería ser de acero...... ha, pero tendría que ser inoxidable... con tanta
saliva............ y comida..... y chupe......... No, mejor de........... de
algo muy duro... el acero debe saber muy feo..... pareceríamos caballos con
freno....... además tendríamos el hocico frío todo el tiempo.....
-¿Cómo que
hocico?
-Bueno, es
que estábamos hablando del caballo.
-Pero no es
manera de hablar.
-Si nadie me
oye, nada más estoy pensando.......
-Eso no
importa...... se debe hablar bien y también pensar bien.
-Si alguien
sabe leer el pensamiento, que quemada te das".
-¡Ay!
-"Hija
de tu".....
-¿Dolió?
A ver, le voy a poner un poquito más de anestesia.
-"En la
madre.....
-¿Ya ves
pendejo, para que te quejas?
-Me agarró
descuidado........ con razón se llama Dolores la doctorcita............ Pinche
anestesia....... siempre me deja el hoci......... la boca como si tuviera una
lengua de cerdo........ no, de res, es más grande.............. Bonitos
ojos........ con el tapabocas parece una odalisca........... sus senos se
pegan en mi brazo........... No la amueles doctorcita, solo falta que me
ponga cachondo y se me pare....... mejor pienso en otra
cosa.............................. ¡Carajo! ¿Y cómo pienso en otra cosa con
una chiche en mi brazo?.......... soy un ser humano…
-Eres un ser
calenturiento, ¡pus que!
-Nigüas buey,
yo sé controlar mis impulsos.
-Sí, pero no
controlas tu mente cochambrosa.
-¿Y qué hago?
me está restregando sus pechos.
-Pues piensa
en tu mamá.
-¡La tuya!
-Es la misma.
-Eso sí.
-Hablas a lo
pendejo.
-¡El único
que habla con pendejos eres tú!...................... Ha chinga, creo que ya
me “alburié” yo solo.... y por partida
doble...........................................................................
Tiene muy bonitos ojos........ y también es simpática............ me gusta,
me gusta la doctorcita............................... La voy a invitar a salir...
-¿Y si te
rechaza?
-No, no creo,
me trata de manera muy especial, muy atenta y amable.
-Porque es su
trabajo.
-No, he visto
como trata a otros pacientes y no los trata como a mí................... si,
la voy a invitar a salir............. la voy a llevar a cenar a "La
Valenciana"...
-¿Cómo serás
pendejo?, "La Valenciana" es una cantina, ¿piensas enamorarla
llevándola a una cantina?
-Pues ahí
están mis cuates...
-Precisamente,
¿la vas a llevar a un lugar lleno de tus "cuates", para que te
cotorreen y la cotorreen a ella?
-¡Mis cuates
son gente respetuosa y correcta!..............................................................................................
mejor la llevo a otra parte.......... pero ¿adónde?
-¿Ya ves?
solo conoces cantinas y bares.
-Nombre,
también conozco............... conozco............. por ejemplo "Los azulejos"
del "Camino Real".
-Porque una
vez te invitó tu hermana, no te hagas buey.
-Por lo que
sea, pero lo conozco, pendejo..................................... la voy a
llevar.......... la voy a llevar al "Italianni`s", el que está en
Insurgentes.
-Pero primero
ve solo, a ver si no es muy caro.
-¡Claro!, si
no soy burro.
-No, pero
eres lo más parecido que hay.
-De veras que
es guapa.......... y tiene un cuerpo........... "Bocato di
Cardinale".......... ¿se dirá así?........ así decía mi papá cuando veía
a una nalguita.............. Bueno, como se diga, está que se cae de buena la
doctorcita.
-Deja de
pensar pendejadas, mejor ponte a pensar en conseguir otro trabajo, con el que
tienes no te va a alcanzar ni para llevarla en taxi.
-Ella debe
tener carro............. ¿no, verdad?............ ¡Qué mal rollo ser un
pobretón!............................................ pero no es mi culpa que
me guste........................................................ La gente que
se dedica a la medicina, no debería tener sexo............ Si, deberían ser
eunucos........ Y ellas............ ¿eunucas?
-¡Puta!, que
inteligentes deducciones tienes Ya me imagino: "A ver, todos los
doctores que se reciben hoy, pasen para acá para cortarles su cosa, y ustedes
doctoras, para éste lado para rellenarles la suya" ¡me cae que eres
brillante!
-¡Pinche anestesia!,
que bueno que no me llega a los ojos para seguir contemplando tu carita,
Dolores. Te prometo que vas a ser feliz conmigo mamacita. Te voy a invitar
a.... a......... a algún lugar que no sea cantina para que la pasemos a todo
dar............................................................. Voy a
ponerme el traje gris. El que tiene las solapas tradicionales y
cruzado........ El gris mediano, que no es Oxford ni claro. El que me regaló
aquella de quien no quiero ni acordarme.......... el....... El que me puse
cuando se casó Ramiro.................. Bueno, el único que
tengo....................... El único que tengo color gris..............
porque tengo otros......................... uno café y uno azul.
Voy a pasar
por ti a las nueve de la noche............... no, a las ocho, para tener más
tiempo para estar juntos.............. Después de dos o tres copas, te invito
al cine................... no, entonces, mejor paso por ti a las seis, te
llevo al cine, y después a tomar unas copas y a cenar. Cuando estés a todo
dar, embelesada con mi fino trato y mi caballerosidad, te invito así como que
no quiere la cosa a mi casa......... "Solo un rato, para que conozcas mi
cabaña". Tú, curiosa, como cualquier mujer, estarás deseosa de ver cómo
vive un hombre de mundo...
-¿Qué, la vas
a llevar a casa de algún amigo?
-¡Tú no te
metas pendejo!.................. Ya en mi departamento, te voy a invitar una
crema irlandesa. Ésa les encanta a las mujeres.... y también a los
hombres.......... Bueno, a mí me encanta.. Después, al ritmo de melódicas
canciones, te voy a envolver con mi mirada de león en brama, y suavemente,
con seductora pasión y sublime candor, he de besarte con ésa ternura
excepcional que me distingue, para llevarte, poco a poco, al dintel de la
gloria, hasta derribar con mi ternura tu exigua resistencia ante mi fanático
brío........................ “¡Nhombre”, no te la vas a
acabar!................... Tu coquetería, se verá colmada con mi decidido
anhelo, envuelto en la magia que produce el ensueño amoroso de una primera
noche de incontinencia apasionada.
-“Huta”, ¿dónde
leíste eso?
-Sabes bien
que en ninguna parte, es mío, como el aire que respiro.
-A mi no me
vengas con inspiración poética, porque luego terminas consolándote tu solo.
-Voy a ser,
Dolores, tu dolor eterno. Ése dolor que mientras más mata, más se quiere
tener. Como dijo el poeta....... como se llame: "Cuando es muerte de
beber, beben más, y de ésta suerte, viendo que el ver me da la muerte, estoy
muriendo por ver".........................................................................
No creo que duremos más de seis meses sin que el amor nos llame a
casarnos........................... Yo ya tendré un buen trabajo, y voy a
cambiarme a un departamento más amplio, donde tengamos espacio para nuestros
hijos……… Solo dos. Espero que seas de ésas que piensan que la familia pequeña
vive mejor.............. Si no, si quieres más, los tendrás. Yo lo asumiré
con mi gran capacidad de trabajo y responsabilidad enfrentando cualquier
tarea por ardua que sea, mientras tú, como toda una señora, te dedicas al
hogar y a los retoños. Como dijo Díaz Mirón: "Tu como paloma para el
nido y yo como león para el combate"…
"En la deliciosa calidez de mi
romanticismo indómito,
abrazaré tu cuerpo y volaré con alar
imponente.
Tus ojos color de obsidiana,
misteriosos como un mito,
se enmarcan en el inmaculado verde
jade del oriente.
Por eso serás de mis sueños y mis
poemas la quimera,
y todos comprenderán que solo tú, eres
la mera-mera"
-No mames
buey, no mames...
-Bueno, no he
terminado, hasta los grandes poetas dejan descansar sus poesías y luego las
perfeccionan y las corrigen.
-“Huta”, pero
esto no tiene corrección y menos es perfectible, es una jalada monumental...
-Se le pueden
cambiar cosas...... Por ejemplo.... por ejemplo........... "vibras en mi
ser como serenata apasionada"...
-Sí, y rima
con: "mientras yo sigo escribiendo mamada tras mamada"...
-La voy a
conquistar, ya verás........................................ aunque
después...
-¿Después
qué?
-Nada, estaba
pensando en la crisis.
-¿Cuál
crisis? Porque hay muchas, la de los tres meses, la de los siete, la de los
tres años, la de los siete años...........
-Ya párale,
ya me las sé. Me refiero a la primera, ni modo que esté pensando en las
demás. No me gusta adelantarme a los hechos.
-¿Ha no?
-Por ejemplo,
un día, en el tercer mes, se me ocurre irme un sábado con mis amigos a la
cantina y no le llamo. Ella se encabrona, y desaparece por dos días, ni me
llama ni me contesta, y tú empiezas a hacer estragos. Que si ya no le
intereso, que la regué, que seguramente tiene un mejor partido........ Y yo
me pongo bruto y empiezo a recordar nombres y teléfonos para prepararme por
un posible abandono, mientras tú, muy campante, me sigues metiendo ideas a la
cabeza, y ella, a lo mejor, ni siquiera se molestó.
-Mi
obligación es ponerte las cartas sobre la mesa, para que puedas analizar todo
el panorama.
-……………¿Cómo
va ésa canción que canta Marco Antonio Muñiz?. La del que le canta a su
corazón........................................
Quijote y
altanero, estúpido embustero, te has vuelto a equivocar.
Y ahora que
estás prendido, de unos ojos bonitos,
hay corazón
maldito, despacio, despacito, te has vuelto a enamorar.
Se ve que no
escarmientas de todo lo pasado,
te tiene sin
cuidado, el verte encadenado, al amor una vez más.
Te gusta
cobijarte al sol que más calienta, desatas la tormenta
y dejas que la
cuenta, después la pague yooooooo.
No te
acostumbres a probar el amor, que es una bebida fuerte,
a veces salva,
y a veces, causa la muerte.
Si abres los
ojos y el amor está ahí, entonces que Dios te guarde,
porque es
difícil poder escapar, cuando ya es tarde.
Tarará ra-ra-rá, ta-ra-ra-rá ra-ra-rá.
-¡Carajo! ¿Te
la vas a echar toda? Cantas horrible.
-No la estoy
cantando, la estoy pensando buey.
-No sé qué te
sale peor, si cantar o pensar.
-"Corazón
Maldito"....................
-¿Qué?
-La canción se
llama "Corazón Maldito”, y te queda al pelo.
-Niguas, yo
no soy tu corazón.
-Te llamamos
de muchas maneras, conciencia, sub-conciente, el otro yo, el yo interno, y
algunos hasta corazón.
-El autor de
la letra de "Corazón Maldito", se llama Pablo Herrero y la música
es de José Luis Armenteros.
-¿Cómo sabes?
-¿Se te
olvida que a mí no se me olvida nada de lo que tú aprendes?
-Sí, carajo,
tu disco duro debe ser el de una supercomputadora.
-Mucho más
que eso, como ustedes mismos dicen: no se la acabarían...
-Si, ¿verdad?
“Is, barníz, con su brochís”. Ya déjame en paz..... tengo que dedicarme a la
conquista de Dolores y nada más.
-¿Y cómo le
vas a hacer, si con la anestesia no puedes ni "hablur"?
-A ti
valiéndote, ¿no?.................................... siente mi mirada......
Dolores..... siente la pasión que te mando desde dentro de mi
alma................ Dolores................. Dolores, puedes sentir mi amor
en el reflejo de mis ojos............. te hipnotizaré y caerás
rendida............. siente mi profunda mirada que atraviesa tu
conciencia........... cuando te invite a salir dirás que sí, completamente
enamorada............. amante............ entregada............. mis ojos te
dominan y controlan tus sentimientos.....................................................”
-
Ya terminamos señor, ¿todavía está muy anestesiado?
-
Go, gaga.
-Que
bueno. Le voy a dar para el próximo viernes su cita
-¿Jita?
Ha ji, mi jita........... Ejte................... no jé ji... ueno, ji
dejea.... que ujté y yo.... me guj-aría que
.................................................................................................................................................que
me abuntara en un bebelito la jita.... ej que je me olvidó mi agen-da.
|
Caramba, ya se me fue toda esta publicación
sin entrar en materia. Tendrá que ser paciente El tal Cardán, para la otra
semana. Mientras, me disculpo presentando algunas de sus pinturas, porque
Carlos Cardán es también pintor, y al final un chistecillo para que me
perdonen.
Alquimista
Alquimista 1
Alquimista 2
Alquimista 3
Quijote Cúbico
Maja
FINAL
JOCOSO
-No, ya no… ya
no…
La pareja no dio
gran importancia y continuaron mirando el espectáculo. El niño dice otra vez,
pero más fuerte y afligido:
-No… por favor,
ya no… ya no… - sin quitar la vista de las hermosas mujeres.
La señora,
entonces se acerca al niño y le pregunta:
-¿Qué te pasa mi
vida?
El niño ya con
franco llanto balbucea:
-Es que… mi
mamá… me dijo que si veía… mujeres desnudas… me iba a convertir en… piedra.
La mujer,
aliviada porque no era nada grave, le dice sonriente:
-No te preocupes
amor, eso no es cierto…
El niño, con los
brazos estirados y las manos en la entrepierna, sin dejar de llorar ni de
mirar a las espléndidas mujeres dice:
-Sí, sí es
cierto… si ya me estoy poniendo durito, durito…
|
Bye…
Gracias Google, Wikipedia y
Biografías del Ayer de Luis Roberto.
Respetuosamente,
El abuelo Febo
xocdzib@yahoo.com
Gracias por compartir esta clase de información, esperamos ver más
ResponderEliminar